Los científicos han confirmado que el calentamiento global afecta al 98% de la superficie del planeta. El Instituto Forestal Europeo estima que para el año 2050 el incremento de la población mundial necesitará de un 50% más de alimentos, un 45% más de energía y un 30% más de agua dulce.
Para dar respuesta a estas necesidades debemos cambiar nuestra forma de producir y de consumir, y asumir un modelo de producción y de consumo más sostenible y respetuoso con el medioambiente.
La bioeconomía circular ofrece sustituir materiales de origen fósil por otros de origen biológico, renovables, reciclables y reutilizables. Además, representa ser más ambicioso que los objetivos de la economía circular, ya que se trata de eliminar los productos de origen fósil y lograr la descarbonización de la actividad humana.
El sector forestal genera materias primas sostenibles como la madera, la biomasa, las fibras de celulosa, etc. Con ellas se pueden elaborar productos y muebles de madera directamente o utilizarlas en los procesos productivos de otros sectores para fabricar productos y servicios más sostenibles.